La Orquesta de Extremadura, junto a Roberto Forés y nuestra soprano Carmen Solís, cierra la temporada de abono con obras de dos colosos de la historia de la música. Dos hombres jóvenes que miran la muerte y la trascendencia desde lugares opuestos: Mahler imagina la visión de los cielos a los ojos de un niño; Strauss se pone en la piel de un artista que agoniza. Infancia y muerte siempre pegadas en Mahler desde su hogar natal, inocencia e ironía truculenta en una sinfonía que lo abarca todo. En la obra de Strauss, añoranza de la niñez, remembranzas de las pasiones vitales y transfiguración “desde los confines infinitos del cielo”.